2 diciembre 2021 | Visita apostólica

VIAJE APOSTÓLICO DE SU SANTIDAD EL PAPA FRANCISCO A CHIPRE Y GRECIA (2-6 DE DICIEMBRE DE 2021) ENCUENTRO CON LAS AUTORIDADES, LA SOCIEDAD CIVIL Y EL CUERPO DIPLOMÁTICO DISCURSO DEL SANTO PADRE

“Ceremonial Hall” del Palacio Presidencial de Nicosia

[…] Una perla, en efecto, se convierte en lo que es porque se forma con el paso
del tiempo, requiere años para que las diversas estratificaciones la hagan
compacta y reluciente. De este modo, la belleza de esta tierra deriva de las
culturas que a lo largo de los siglos se encontraron y mezclaron. También hoy la
luz de Chipre tiene muchos matices, varios son los pueblos y las personas que,
con tonalidades diversas, componen la gama cromática de esta población. Pienso
también en la presencia de muchos inmigrantes, que porcentualmente es la más
relevante entre los países de la Unión Europea. Salvaguardar la belleza
multicolor y poliédrica del conjunto no es fácil. Se necesita tiempo y paciencia,
como para la formación de la perla. Se requiere una mirada amplia que abrace la
variedad de las culturas y tienda hacia el futuro con amplitud de miras. En este
sentido, es importante tutelar y promover a cada componente de la sociedad, de
modo especial a los que estadísticamente son minoritarios. Pienso además en
varias entidades católicas que se beneficiarían de un oportuno reconocimiento
institucional, para que la contribución que aportan a la sociedad por medio de
sus actividades, en particular educativas y caritativas, sea definido
adecuadamente desde el punto de vista legal.
Una perla pone de manifiesto su belleza en circunstancias difíciles. Nace de la
oscuridad, cuando la ostra “sufre” después de haber recibido una visita
inesperada que amenaza su incolumidad, como, por ejemplo, un grano de arena
que la irrita. Para protegerse, reacciona asimilando aquello que la ha herido,
envuelve aquello que para ella es peligroso y extraño y lo transforma en belleza,
en una perla. La perla de Chipre fue eclipsada por la pandemia, que impidió a
muchos visitantes que accedan a ver su belleza, agravando, como en otros
lugares, las consecuencias de la crisis económica y financiera. Lo que garantizará
un desarrollo sólido y duradero en este período de reactivación no será el
entusiasmo por recobrar cuanto se ha perdido, sino el compromiso por promover
la recuperación de la sociedad, particularmente por medio de una decidida lucha
contra la corrupción y las plagas que atentan contra la dignidad de la persona;
me refiero, por ejemplo, al tráfico de seres humanos. […]