17 diciembre 2015 | Discurso del Santo Padre, Discursos

DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCIS CON MOTIVO DE LA PRESENTACIÓN DE LAS LETRAS CREDENCIALES DE EMBAJADORES DE GUINEA, LETONIA, INDIA Y BAHREIN

Sala Clementina

Señores Embajadores,

[…] Todo esto es necesario para superar la indiferencia y construir la paz. El año que está a punto de terminar fue desafortunadamente marcado por una multiplicación de conflictos violentos, tanto de guerra como de terrorismo. Por otro lado, esta situación provoca cada vez más una reacción no violenta pero espiritual y moral en las conciencias más maduras. Esto es lo que queremos y debemos nutrirnos con los medios a nuestra disposición y de acuerdo con nuestras responsabilidades. La Iglesia Católica, de acuerdo con su misión, con el recién comenzado Jubileo de la Misericordia, tiene la intención de difundir el espíritu de perdón y reconciliación en todo el mundo, llamando a los fieles y hombres y mujeres de buena voluntad a abrirse al don de gracia de Dios y practicar aquellos que en nuestra tradición son las «obras de misericordia espiritual y corporal». «Los Estados también están llamados a gestos concretos, a actos de valor hacia las personas más vulnerables de sus sociedades, como los presos, los migrantes, los desempleados y los enfermos» (Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2016, 8). Además, en este Año Jubilar, deseo formular «un llamamiento urgente a los líderes de los Estados para que hagan gestos concretos en favor de nuestros hermanos y hermanas que carecen de trabajo, tierra y techo» (ibid.). En el plano internacional, espero sinceramente que todas las naciones se comprometan a renovar las relaciones con los demás, cooperando activamente en el fomento de la fraternidad incluso entre la gran familia de los pueblos (cf. ibid.). […]