Queridos cohermanos,
[…] Actualmente estamos viviendo un momento excepcional. Cientos de miles de refugiados han venido a Europa o han marchado en busca de refugio de la guerra y la persecución. Las Iglesias cristianas y muchos ciudadanos individuales de su país brindan una enorme ayuda para recibir a estas personas brindándoles asistencia y cercanía humana. En el espíritu de Cristo queremos continuar enfrentando el desafío de la gran cantidad de necesitados. Al mismo tiempo, apoyamos todas las iniciativas humanitarias para garantizar que las condiciones de vida en los países de origen sean más llevaderas. […]