Juntos contra la trata: “Para nosotras es una gracia poder vivir con ellas porque podemos compartir nuestra vida y ver los progresos que hacen”

Juntos contra la trata: “Para nosotras es una gracia poder vivir con ellas porque podemos compartir nuestra vida y ver los progresos que hacen”

Durante la Jornada de Oración y Reflexión contra la trata tuvimos la oportunidad de hablar con una de las sores que acompaña a las víctimas en una casa de protección. Durante la entrevista, aseguró que tanto las hermanas como las jóvenes acogidas participaban en la vigilia con mucha alegría, pues considera muy importante dedicar momentos para rezar juntas y tomar consciencia de lo que el papa Francisco ha definido como “una lacra” de la sociedad.

Explicó que algunas de las víctimas son tan vulnerables que deben hacer un recorrido para entender que han sido explotadas: “A veces no son conscientes de sus derechos, otras veces se convierten en esclavas del miedo”.

La actitud de la herma es positiva, pues afirma que durante los últimos años, el trabajo que se está haciendo con las comunidades religiosas y las asociaciones de laicos ha dado resultado. “Para nosotras es una gracia poder vivir con ellas porque podemos compartir nuestra vida y ver los progresos que hacen, a veces rápidos, a veces lentos. Lo bonito es que nos enseñan el amor por la vida y la valentía, su alegría, la fuerza que las acompaña incluso en los momentos de mayor dificultad, de prueba… Es un gran don de Dios”.

Para poner fin a la trata de personas, la religiosa señala la importancia de una reflexión social sobre el porqué de esta situación, evitando la indiferencia a través del compromiso personal, cada quien según sus propias competencias. Además, aclara que es fundamental el acompañamiento a las víctimas, sobre todo en la primera fase, y que puede hacerse a través de un voluntariado en las casas de acogida, enseñándoles el idioma o cocinando con ellas: “Muchas veces se relacionan solo con sus connacionales. Sin embargo, darles nuestro tiempo, estar juntas, ofrecerles una amistad es importantísimo, porque ellas están convencidas de que muchos de nosotros las despreciamos… Es precioso hacerse amiga de una mujer que ha recorrido un camino como este”.