27 noviembre 2014 | Discurso del Santo Padre, Discursos

DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO A LOS PARTICIPANTES EN EL CONGRESO INTERNACIONAL DE PASTORAL DE LAS GRANDES CIUDADES

Sala del Consistorio

Queridos hermanos:

[…] Dios sigue hablándonos hoy, como lo hizo siempre, por medio de los pobres, del «resto». En general, las grandes ciudades hoy están habitadas por numerosos inmigrantes y pobres, que provienen de las zonas rurales o de otros continentes, con otras culturas. También Roma… El vicario de Roma puede decirlo, ¿no? Hay muchos mendigos por doquier… Son peregrinos de la vida, en busca de «salvación», que muchas veces tienen la fuerza para seguir adelante y luchar gracias a un sentido último que reciben de una experiencia sencilla y profunda de fe en Dios. El desafío es doble: ser acogedores con los pobres e inmigrantes —la ciudad, en general, no lo es, rechaza— y valorar su fe. Es muy probable que esa fe esté mezclada con elementos del pensamiento mágico e inmanente, pero debemos buscarla, reconocerla, interpretarla y seguramente también evangelizarla. No tengo dudas de que en la fe de estos hombres y mujeres hay un potencial enorme para la evangelización de las zonas urbanas. […]